César Sena pone fin a la huelga de hambre, pero no recupera el frigobar y TV.
El acusado de planear junto a sus padres el crimen de Cecilia Strzyzowski , duró dos días sin comer, 23 menos de lo que aguantó la madre Marcela Acuña. César que está alojado en el Complejo Penitenciario de Villa Barberán desde el 27 de junio, este jueves comunicó que no seguirá con la medida. Pero seguirá sin acceder a los electrodomésticos, confirmaron fuentes judiciales a NORTE.
«Cascotito», «Mata Mujeres» o «Caprichito», los dos últimos apodos se lo adjudicaron los otros presos, decidió empezar a comer el menú que ofrece el Servicio Penitenciario Provincial (SPP). El 31 de julio comunicó a las autoridades del presidio que no consumiría sólidos.
Solamente ingería agua o infusión. César de 19 años, está sindicado de ser el femicida, aquel 2 de junio, cuando con una mentira de que viajarían a buscar una nueva vida laboral en Usuahia, emboscó a Cecilia en la casa de Emerenciano y Marcela Acuña, en Santa María de Oro 1460.
El heredero este jueves debió ampliar la declaración de imputado, los fiscales le hicieron saber las pruebas en su contra, antes de la audencia en la Cámara de Apelaciones, la semana próxima. Una vez más se abstuvo. No quiere hablar del crimen de su exmujer, pero volvió a insitir con su demanda, de preparar una celda acorde a su anterior estilo de vida: anafe, pava eléctrica, televisor, un celular las 24 horas, y un frigobar. Todo le fue denegado.
Pese a que no podrá contar con esos lujos en el Complejo , donde sigue solo y no habla con nadie, César levantó la huelga de hambre. Ya habían confiado fuentes penitenciarias a NORTE: «No va a aguantar, es muy tierno». La medida comenzó el 31 de julio y terminó el miércoles 2 de julio.
