Chile: Gabriel Boric impulsa una reforma jubilatoria

El presidente anunció el envío de un proyecto para terminar con el modelo previsional de Pinochet. Hay dudas en torno a su aprobación en el Congreso.

El presidente de Chile, Gabriel Boric, quiere terminar con el sistema privado de jubilación heredado de la dictadura de Augusto Pinochet, y presentó un proyecto de ley que elimina las Administradoras privadas de Fondos de Pensiones (AFP) y crea en su reemplazo un sistema mixto que, según prometió, aumentará el monto de las pensiones.

Se trata de una de sus grandes promesas de campaña: abolir un modelo que rige desde 1981 y que fue pionero en el mundo en monopolizar la capitalización individual de los trabajadores.

Sin embargo, muchos sostienen que el proyecto no prosperará en el Congreso. “Eso no va a pasar”, sentenció el secretario general de la Confederación Bancaria de Chile y líder del movimiento No+AFP, Luis Mesina.

En esa línea, el dirigente sindical cuestionó fuertemente la iniciativa al considerar que “no cambia casi nada” del sistema que rige actualmente.

La propuesta de Boric, que ingresaría la semana próxima al Congreso, donde no tiene mayoría en ninguna de las cámaras, mantendrá el ahorro individual del 10,5% del salario, pero le agrega otro 6% a cargo del empleador. Ese nuevo aporte irá a un fondo de seguro social que según el presidente permitirá mejorar las pensiones. Además, el Estado también haría un aporte para cumplir con una Pensión Garantizada Universal (PGU), una especie de jubilación mínima por encima del índice de pobreza.

DE e esa manera, según el proyecto, las AFP serán reemplazadas por un Sistema Mixto de Pensiones, con un gestor público de inversión y actores privados.

Asimismo, el nuevo sistema conserva los ahorros previsionales de cada ciudadano y otorga libertad para elegir dónde invertir los fondos de pensiones, algo que hoy no existe y que está a cargo de las AFP.

LAS CRÍTICAS AL PROYECTO

El proyecto generó fuertes cuestionamientos, tanto de la oposición como de las propias administradoras privadas de pensiones y hasta del movimiento No+AFP, que busca eliminar el modelo y no sólo reformarlo.

Las AFP dijeron que la iniciativa significa un “retroceso’ para el país. ”Las personas han sido claras en señalar que desean mantener la libertad de elección y la capitalización individual para la nueva cotización’’, dijo Alejandra Cox, presidenta de la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones.

La oposición se sumó a las críticas. El jefe de la bancada de la Unión Democrática Independiente (UDI) en el Senado, Iván Moreira, dijo que existen “justificadas dudas” sobre el destino del 6% de aportes adicionales a cargo del empleador. Además, afirmó que los chilenos preferirían que esa recaudación adicional se refleje en sus cuentas individuales.