El Chaco no se sumará al paro nacional de la UTA

El aporte del Gobierno para atender demandas salariales despeja cualquier hipótesis de conflicto para el corto plazo. Cuenta regresiva para la licitación.

En los últimos meses se naturalizó que de forma periódica el transporte público de pasajeros sea un servicio que no funcione ya sea por medidas de fuerza en reclamo de pago de haberes de parte de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) cuando no un lockout que impulsan las empresas para exigir, mayores subsidios de una actividad que la prestan privados pero con fortísima incidencia de parte de los gobiernos nacional y provincial vía los subsidios.

En Chaco no se dará el paro que anunció la UTA para la próxima semana para el servicio de colectivos de corta y media distancia.

En ese sentido, en las últimas semanas los usuarios de Resistencia padecieron primero un paro de parte de los choferes en rechazo a la licitación que encaraba la Comuna y luego le siguió la decisión de empresarios de dar por caído el convenio que los unía al Municipio y directamente no sacar los coches. Conclusión, cinco días sin el servicio.

Ahora, con un conflicto irresuelto hace meses, la UTA señaló que la próxima semana efectuará una medida de fuerza por 72 horas, la anterior había sido de 48 horas ante la negativa de la federación de transportistas del interior (Fatap) que tienen las concesiones en el interior y no quieren firmar el mismo acuerdo salarial que se pactó para el AMBA.

En Chaco, el paro logró desactivarse la semana pasada a partir de la intervención del gobierno provincial de aportar los recursos que no llegan desde la Nación y, teniendo en cuenta que la interrupción de actividades que se hará es por el mismo motivo, en la provincia no hay razones para pensar en un escenario de conflicto en el corto plazo.

SUBSIDIOS

La ecuación es simple, si no es el gobierno nacional no destina los recursos lo tiene que hacer la Provincia, si no ninguno lo hace no quedará más remedio que el paro de los trabajadores del volante. Y ese es principalmente la demanda que encaran los gobernadores del Norte para que la asignación de recursos sea con criterios de equidad en razón de que si la lógica se mantienen, las desventajas para los que viven en esta parte de Argentina se traducirá en que abonen el pasaje más caro, porque los distritos provinciales no tienen las espaldas suficientes para solventar casi todo.

Hoy, el costo de cada pasaje es de 70 pesos a nivel nacional mientras que en Buenos Aire y la Ciudad Autónoma, que concentran los subsidios, es de apenas 25.

En el Chaco, los aportes provinciales son cerca del 50 por ciento del total de lo que reciben las empresas, el 25 por ciento llega desde Nación y el resto por la recaudación que viene de la venta de pasajes.

Así las cosas, la intención del Ejecutivo es de que por primera vez en mucho tiempo, uno de los servicios públicos que es reconocido por todos como en entre los que peores funciona, revierta esa posición y ello solo es posible con una fuerte inversión.

Para ello, se anunció que el próximo lunes se efectuará el llamado a licitación para lo que será el transporte para toda el área metropolitana (que se unificará a partir de la decisión de los municipios de ceder potestades) a lo que será el entre metropolitano que será autoridad de aplicación en el sistema.