El salario mínimo docente, en jaque: en CABA debería subir 72,6% para igualar 2015

Buenos Aires, 26 de marzo de 2025

El Gobierno de Javier Milei impuso por decreto un nuevo salario mínimo docente de $500.000, con un aumento del 19%, pero la medida no calma las aguas. Sin acuerdo con los gremios y con una inflación que no da tregua, los maestros siguen perdiendo poder adquisitivo: para recuperar el nivel de diciembre de 2015, el sueldo promedio necesitaría un ajuste del 30,9%. En CABA, la brecha es brutal: un 72,6%. ¿Es este el fin de la paciencia docente? Te contamos todo y queremos saber: ¿qué opinás de esta pelea?

Un aumento que no alcanza

El salario mínimo de $500.000, fijado por el Decreto 231/2025, aplica a un docente de jornada simple (20 horas semanales) con 10 años de antigüedad. El 19% de suba suena bien en papel, pero no resiste la comparación histórica. Según un informe de la Universidad de Buenos Aires (UBA), ajustado por inflación (IPC), el poder de compra de ese sueldo en 2015 equivaldría hoy a $654.500 a nivel nacional –un 30,9% más–. La brecha varía por provincia:

CABA: +72,6% ($863.000).
San Luis: +70,2% ($850.000).
San Juan: +61,5% ($807.500).
Santa Cruz: +60,6% ($803.000).
Tucumán: +22,5% ($612.500).
Corrientes: +11,2% ($556.000).
La Pampa: +1,8% ($509.000).

“El aumento es una burla frente a nueve años de pérdida”, tuiteó @DocentesAr en X. En CABA, donde el costo de vida es el más alto, un maestro necesitaría $863.000 para igualar el poder adquisitivo de hace una década. En La Pampa, en cambio, el rezago es casi nulo.

Una paritaria que nunca fue

La decisión de Milei de imponer el salario por decreto, sin negociar con los gremios, reavivó la bronca. En febrero, el Ejecutivo ofreció los mismos $500.000 en la paritaria nacional, pero CTERA, SADOP y otros sindicatos lo rechazaron y fueron al paro en el arranque del ciclo lectivo 2025. “No cubre ni la inflación de 2024, menos la de una década”, dijo Sonia Alesso, de CTERA, a NORTE. El Gobierno, fiel a su línea, trasladó la pelota a las provincias, muchas en rojo fiscal.

En X, el malestar estalla. @EducaciónOk posteó: “$500.000 impuestos por decreto, Milei nos desprecia”. @GremiosUnidos sumó: “Sin paritarias no hay paz, se vienen más paros”. La amenaza de nuevas medidas de fuerza planea sobre abril.

Una década de erosión

Desde 2015, la inflación acumulada supera el 2.500%, mientras los ajustes salariales docentes –atados a paritarias fragmentadas y fórmulas discontinuas– no siguieron el ritmo. El pico de pérdida fue en 2023 (58 sueldos para un auto 0km), y aunque el IPC bajó a 2,4% en febrero 2025, el daño estructural persiste. “Las provincias no pueden solas, el Estado nacional se lava las manos”, disparó un docente en @ChacoEduca.

¿Qué sigue?

Con $500.000 como piso, los gremios preparan una contraofensiva. “Si no hay diálogo, hay conflicto”, advirtió Alesso. En CABA y San Luis, donde la brecha es mayor, las asambleas ya discuten paros. El Gobierno, meanwhile, defiende su ajuste: “Es lo que hay con esta herencia”, dijo un vocero off the record. Pero para los docentes, el aula no espera.

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