Impacto del ataque de Israel a Irán en los mercados globales: petróleo al alza, bolsas en rojo y oro como refugio

El ataque de Israel contra instalaciones nucleares y militares de Irán en la madrugada del viernes 13 de junio de 2025 ha generado una fuerte reacción en los mercados financieros y de materias primas, exacerbando la incertidumbre geopolítica en Oriente Próximo. Este evento, que marcó una escalada en el conflicto entre ambos países, disparó los precios del petróleo, presionó a la baja las bolsas globales y consolidó el oro como activo refugio, mientras los inversores buscan seguridad ante la posibilidad de una mayor inestabilidad regional.
Petróleo: un repunte impulsado por el riesgo geopolítico
Los precios del petróleo experimentaron un aumento significativo tras el ataque. Los futuros del West Texas Intermediate (WTI), referencia en Estados Unidos, subieron hasta un 15%, alcanzando los 77,5 dólares por barril, su nivel más alto en casi un año, antes de moderarse a 73 dólares (+7%) a media mañana. Por su parte, el Brent, crudo de referencia en Europa, escaló un 13% hasta los 78,5 dólares por barril, estabilizándose en 74,2 dólares (+7%).
Este repunte refleja los temores del mercado ante una posible interrupción en el suministro de crudo, dado que Irán es uno de los principales productores de petróleo, con más de 3,3 millones de barriles diarios en agosto de 2024, según la OPEP. Aunque el ataque no afectó directamente las instalaciones petroleras iraníes, la amenaza de represalias y la posibilidad de que el conflicto se extienda al Estrecho de Ormuz—por donde transita el 25% del petróleo mundial—han elevado la prima de riesgo geopolítico. Analistas de Saxo Markets advierten que cualquier indicio de interrupciones en el suministro mantendría la volatilidad elevada y presionaría al alza los precios del crudo.
La OPEP+, que había acordado aumentar la producción en 180.000 barriles diarios a partir de diciembre de 2024, enfrenta ahora presiones adicionales debido a la sobreproducción de países como Irán y Kazajistán, quienes se comprometieron a recortes compensatorios. Sin embargo, la escalada bélica podría complicar estas dinámicas, especialmente si se reimponen sanciones estadounidenses a las exportaciones iraníes.
Bolsas globales: caídas ante la aversión al riesgo
El ataque ha desencadenado una ola de aversión al riesgo, reflejada en caídas generalizadas en las bolsas mundiales. En Europa, el Ibex 35 español retrocedió un 1,75%, mientras que el Euro Stoxx 50 cayó un 1,5%. Las bolsas asiáticas también se vieron afectadas, con el Nikkei japonés perdiendo un 0,92% y los mercados chinos un 1%. En Wall Street, los futuros del S&P 500 anticipaban una apertura negativa con una baja del 1,4%, según el finance card arriba.
Sectores sensibles al riesgo geopolítico, como las aerolíneas, fueron particularmente castigados. Por ejemplo, IAG (matriz de Iberia) registró caídas de entre el 4% y 5% tras un desplome inicial del 7%, afectado por el aumento del petróleo y la cancelación de vuelos en la región. En contraste, empresas petroleras como Repsol (+1,44%), Shell (+1,71%), TotalEnergies (+1,73%) y ExxonMobil (+2,13%) se beneficiaron del alza del crudo, al igual que las compañías armamentísticas como Lockheed Martin (+3%) y RTX (+2,4%).
Analistas como Pedro del Pozo de Mutualidad señalan que los inversores no anticipan un conflicto prolongado, lo que limita la magnitud de las caídas. Sin embargo, la incertidumbre sobre la respuesta iraní mantiene a los mercados en vilo, con el VIX (índice del miedo) en Wall Street disparándose un 20% en sesiones recientes.
Oro y divisas: refugios en tiempos de incertidumbre
El oro, considerado un activo refugio por excelencia, reaccionó con una subida de más del 1%, alcanzando los 3.450 dólares por onza, cerca de su máximo histórico de 3.500 dólares registrado el 22 de abril de 2025. Sin embargo, expertos como Carsten Menke de Julius Baer advierten que la reacción del mercado es moderada y que el oro no siempre actúa como una cobertura efectiva contra perturbaciones geopolíticas a largo plazo, salvo que el conflicto interrumpa significativamente el suministro de petróleo o se extienda regionalmente.
En el mercado de divisas, el dólar perdió parte de su atractivo como moneda refugio debido a la incertidumbre generada por las políticas económicas de Donald Trump, pero aún así se revalorizó un 0,5% frente al euro, cotizando a 1,153 dólares por euro tras tocar mínimos de tres años. La divisa estadounidense mostró ganancias tímidas contra el franco suizo y el yen japonés, mientras que el euro retrocedió frente al dólar en un contexto de mayor aversión al riesgo.
Contexto geopolítico y perspectivas
El ataque israelí, que tuvo como objetivo instalaciones nucleares y militares iraníes, incluyó la muerte de varios comandantes y científicos, según reportes. Israel justificó la acción como una medida para impedir que Irán desarrolle armas nucleares, mientras que Estados Unidos se desmarcó del ataque y advirtió a Teherán contra represalias hacia objetivos estadounidenses. La reunión prevista para el domingo 15 de junio entre emisarios de Washington y Teherán sobre el programa nuclear iraní quedó en suspenso, complicando las negociaciones.
La respuesta de Irán será clave para determinar la trayectoria de los mercados. Teherán prometió un “contraataque severo”, pero la magnitud y el alcance de su reacción aún son inciertos. Analistas de Bloomberg y Saxo Markets coinciden en que una escalada prolongada podría sostener la presión alcista sobre el petróleo y los activos refugio, mientras que una desescalada devolvería el foco a fundamentos económicos, como la débil demanda de crudo por parte de China, que representa el 20% del crecimiento global de la demanda en 2024-2025, frente al 70% en 2023.
Implicaciones para Argentina
En el contexto argentino, el aumento del precio del petróleo podría exacerbar las presiones inflacionarias, ya que el país depende de importaciones de combustibles. Como se señaló en el artículo de Página/12 sobre la caída del poder de compra, la inflación, aunque desacelerada al 1,5% mensual en mayo de 2025, sigue siendo una preocupación central para el 20,8% de los encuestados en encuestas recientes. Un alza sostenida en los costos de la energía podría agravar la situación económica, especialmente para los hogares que ya enfrentan restricciones en su capacidad de gasto.
Además, la caída de las bolsas globales y la fortaleza relativa del dólar podrían impactar los mercados financieros argentinos, como se observó en abril de 2024, cuando las acciones locales cayeron hasta un 8,2% en el exterior y los dólares financieros subieron significativamente. Esto podría complicar los esfuerzos del gobierno de Javier Milei por estabilizar la economía, especialmente en un contexto de ajuste fiscal y desfinanciamiento de sectores clave como la educación, como se detalla en el informe de Tiempo Argentino.
Reflexión y perspectivas
La escalada del conflicto entre Israel e Irán introduce una nueva capa de incertidumbre en los mercados globales, con el petróleo, el oro y las bolsas reaccionando a la percepción de riesgo geopolítico. Mientras los inversores buscan refugio en activos seguros, la evolución de la situación dependerá de la respuesta iraní y de la capacidad de las potencias globales para evitar una guerra regional más amplia. ¿Cómo crees que este conflicto podría afectar la economía argentina en el corto plazo? ¿Qué medidas podrían tomarse para mitigar el impacto de la volatilidad del petróleo? Comparte tus ideas en los comentarios para enriquecer el debate.
Fuentes: