Rutas Chaqueñas: Un Laberinto de Preocupación para el Corazón Productivo de la Provincia

SÁENZ PEÑA, Chaco – 13 de Junio ​​de 2025 – La Federación Económica del Chaco (Fechaco) ha encendido las luces de alarma: el estado de las rutas, tanto nacionales como provinciales, se ha convertido en una pesadilla creciente para comerciantes y empresarios. Lejos de ser un mero fastidio, el deterioro de los caminos amenaza con estrangular el flujo de personas y, crucialmente, el transporte de cargas, motor vital de la economía regional.

José Luis Cramazzi, referente de Fechaco, no anduvo con rodeos. «Es indiscutible que hay que hacer una revisión general, vemos que las rutas del país están muy colapsadas», sentenció. Pero la mirada de Cramazzi se posa con particular preocupación en la propia geografía chaqueña. No es solo la archiconocida Ruta Nacional 16, la 95 o la 89 que une Charata con Santiago del Estero y la zona de Hermoso Campo; la problemática es transversal y se extiende por todo el entramado vial de la provincia.

El Grito de los Transportistas: Cubiertas Rotas y Bolsillos Vacíos

El temor es palpable entre quienes viven sobre ruedas. Los transportistas de cargas, la columna vertebral del comercio y la producción, son los primeros en sufrir las consecuencias. Cada pozo, cada fisura, se traduce en un gasto extra: cubiertas que se despedazan, vehículos que sufren averías y, en última instancia, costos operativos que se disparan.

Pero no es solo una cuestión económica. El peligro es una constante. Los particulares que transitan estas arterias diariamente manifiestan un descontento que va más allá de la molestia; es una verdadera preocupación por la seguridad. Un pavimento deteriorado, agravado por las lluvias, se convierte en una trampa que puede tener consecuencias fatales. Como bien lo grafica Cramazzi: «en el pavimento cuando hay un pozo y llueve, queda el agua, se afloja la base y se hace más grande todavía ese cráter». Un círculo vicioso que amplifica el riesgo.

¿Soluciones en el Horizonte? Un Llamado a Vialidad Provincial

Ante este panorama desolador, Fechaco no se queda de brazos cruzados. José Luis Cramazzi reveló que la Federación ha llevado la voz de los empresarios y comerciantes a reuniones con legisladores y representantes provinciales. La propuesta es clara: trabajar en conjunto con Vialidad Provincial para abordar las zonas más críticas .

Una de estas reuniones clave tuvo lugar en Sáenz Peña con el diputado Iván Gyoker. Allí, el empresariado del interior manifestó su profunda inquietud, señalando que la situación solo puede empeorar con el tiempo si no se toman medidas urgentes.

«Nosotros le tirábamos algunas propuestas, creo que se puede comenzar a trabajar con Vialidad Provincial para que se hagan algunos bacheos», sostuvo Cramazzi. Y el mensaje para Vialidad es contundente: si bien se observa un «trabajo de bacheo muy importante» en Resistencia, que es positivo, Vialidad Provincial no debería limitar su mirada a la capital . Su misión abarca a todas las localidades del interior, a esos pueblos y ciudades donde el día a día depende del buen estado de las rutas.

La pregunta que resuena en el Chaco productivo es clara: ¿Se escuchará el clamor de los empresarios? ¿Se priorizará la inversión en infraestructura vial para garantizar no solo la competitividad económica, sino también la seguridad de cada chaqueño que transita sus caminos? El tiempo, y las próximas lluvias, lo dirán.