Dos Detenidos por el Crimen de un Joven Dentro del Club Estudiantes
En un trabajo articulado y coordinado entre las distintas comisarías de la Dirección de Zona Metropolitana, junto con la Unidad Fiscal y el Departamento de Investigaciones, se logró esclarecer un homicidio que tuvo como víctima a Pablo Ezequiel González. El crimen ocurrió en el «Rojo Bar», dentro del club Estudiantes de Villa Prosperidad.
Detalles del Incidente
La situación se desató en horas de la madrugada de este domingo, cuando se recibió el aviso del ingreso al Hospital Julio C. Perrando de Franco González, de 20 años, quien trasladó a su hermano Pablo Ezequiel, de 27 años. Este último había sufrido lesiones graves por arma blanca y fue examinado por el médico, quien diagnosticó heridas en la región cardíaca. A pesar de los esfuerzos médicos, Pablo Ezequiel González falleció debido a las lesiones sufridas en el corazón.
Investigación y Detenciones
Las investigaciones permitieron, en el Barrio Balastro II de Fontana, el secuestro de dos vehículos involucrados: un Volkswagen Vento negro y un Volkswagen Bora gris oscuro, ambos hallados abandonados en un descampado. El personal del Servicio Externo de varias comisarías cercó los domicilios donde podría encontrarse uno de los sospechosos.
Las cámaras de seguridad fueron clave para identificar a los responsables del crimen. En ese momento, Sergio Ángel Gerzel, de 47 años, se presentó espontáneamente ante la guardia de prevención de la comisaría Décima, manifestando su temor por su seguridad. Leonardo Benjamín Cabrera, de 21 años, otro de los acusados, también se entregó acompañado por un abogado.
Hallazgos y Procedimientos Legales
Las pesquisas permitieron localizar una prenda con manchas similares a sangre y un arma blanca tipo cuchillo, arrojados durante la huida en la Avenida Vélez Sarsfield. Estos elementos fueron incautados bajo las formalidades legales pertinentes. Los dos sujetos quedaron detenidos y en la semana tendrán que declarar por homicidio simple una vez que nombren a sus abogados.
Este caso refleja la importancia de la colaboración entre diferentes fuerzas de seguridad y el uso de tecnología para resolver crímenes y llevar a los responsables ante la justicia.
