Con la Lluvia Aumenta la Proliferación de Mosquitos: Consejos para Protegerse de los Contagios
La especialista de la UNNE, Marina Stein, considera que los cuidados personales son fundamentales. El escenario se mantendrá, al menos, hasta la llegada del otoño.
La llegada del fenómeno de El Niño -que tiene como característica central el aumento de las precipitaciones- y de la temporada estival, con sus altas temperaturas, generan condiciones óptimas para la proliferación de mosquitos y con ellos los aumentos de casos de enfermedades ya presentes en la zona, como el dengue; pero también encefalomielitis equina, que reapareció después de casi tres décadas en varias provincias del país, entre ellas, el Chaco.
Si bien para el dengue, por caso, hay vacunas aprobadas aún con un alto costo y escaso stock (ver página 3), las recomendaciones de los especialistas para evitar contagios continúan haciendo eje en los cuidados personales, además de la eliminación de criaderos, para el caso del Aedes Aegypti.

NUEVA ALARMA
En diálogo con NORTE, la jefa del Área de Entomología del Instituto de Medicina Regional de la UNNE e investigadora independiente del Conicet, Marina Stein, explicó que la encefalomielitis equina del oeste es producida por un virus distinto al del dengue, en particular uno del género Alphavirus de la familia Togaviridae.
Según los registros oficiales, se registraron más de 1187 casos en caballos a lo largo de 13 provincias, y ya hay un muerto y 11 casos confirmados en personas.
Tras la aparición de los casos en la década del ´80, investigaciones posteriores lograron conocer que la especie vector, es el Aedes Albifasciatus, que tiene una amplia distribución en toda la Argentina.
«Este mosquito se adapta a distintas condiciones climáticas, con lo cual, ha proliferado mucho porque las condiciones de precipitaciones acumuladas después de un periodo de sequía favorecieron que se produzca este desarrollo sincrónico», explican los especialistas.
La especie que cría en charcos, por lo que se las conoce como «mosquito de la inundación». «Luego de alimentarse de vertebrados, la hembra deposita los huevos en la tierra húmeda, no directamente en el agua sino por fuera, y después de 48 horas, el embrión termina su desarrollo. Al llenarse de agua ese lugar, comienza el desarrollo de las larvas», puntualizó Stein.

PRESENCIA EN LA REGIÓN
Según Stein, por lo menos en la zona metropolitana de Resistencia y la capital de Corrientes, el Aedes Albifasciatus «no es tan abundante», como en la zona de sur, por ejemplo, en Santa Sylvina, que fue uno de los lugares pioneros en el registro de encefalomielitis equina en caballos. «La evidencia con la que contamos da cuenta de que, a diferencia de lo que ocurre en Buenos Aires, en esta zona de las provincias del Chaco y Corrientes este mosquito no tiene tanta preponderancia», explicó.
La detección del mosquito también es complicada. La especialista de la UNNE destacó que es de color «marrón», al igual que «un montón de especies que son de este tipo».
«En las zonas rurales, el Chaco tiene más de 90 especies y unas 15 se crían en los charcos, con lo cual, hay que se especialista para distinguirlos», apuntó.