El «campo de Sena»: el supuesto proyecto productivo para dar trabajo a 500 familias que terminó siendo para una sola

Cómo fue la disputa en 2005 por esas tierras que se suponía iban a ser destinadas a emprendimientos colectivos.

El campo de Emerenciano Sena que se convirtió en una de las escenas centrales de la búsqueda de Cecilia Strzyzowski. Ese predio de 90 hectáreas hoy es un lugar apropiado por el dirigente piquetero, pero casi veinte años atrás había sido entregado por el Estado a su movimiento bajo el argumento de que allí se iban a montar proyectos productivos que iban a dar trabajo a más de 500 familias. Acabó siendo un valioso territorio que es explotado por una sola: los Sena.

La historia remite a dieciocho años atrás, cuando integrantes de la agrupación de Sena ocuparon esos predios pero luego recibieron una intimación judicial para que se retiraran de allí. Además, otras familias que se habían instalado en el lugar resistieron el desembarco del movimiento social.

 

LO QUE DECÍA SENA

En agosto de 2005, en medio de los tironeos por el campo, Sena se quejaba en los medios por la lentitud que le atribuía a la justicia provincial para ordenar el desalojo de quienes estaban en esas tierras. «Los mismos que nos dicen ‘por qué no trabajan en vez de protestar’, ahora que podemos hacerlo hacen todo lo posible por impedírnoslo», decía Emerenciano.

«Nos retiramos tan pronto fuimos intimados por la justicia, porque vimos que había un instrumento legal que respaldaba a quienes resistían nuestra llegada. Pero luego la Cooperativa Tres Horquetas renunció a esas tierras, y nos las adjudicaron a nosotros. Sin embargo ahora que el respaldo legal es para nosotros, la justicia, que antes llegó en cohete, ahora marcha arriba de una tortuga», añadía.

Sena aseguraba lamentar la demora especialmente «porque tenemos proyectos productivos que deben ser implementados cuanto antes, ya que tenemos comprados los elementos y los animales para llevarlos a cabo»

En aquel momento se decía que la gestión nacional de Néstor Kirchner planeaba volcar en los proyectos del movimiento de Sena subsidios por unos 3 millones de pesos (en ese tiempo, algo menos de un millón de dólares), para financiar un total de 183 proyectos en los que se afirmaba que trabajarían 530 familias. 

Sena prometía además total transparencia en el manejo de los recursos.  «Queremos que la nación y la provincia nos controlen todo lo que hacemos, que verifiquen el destino de cada peso que recibimos. Estamos seguros de que esto va a tener éxito, y que entonces será un ejemplo de que los desocupados queremos trabajar, y tenemos la capacidad de vivir de nuestro esfuerzo si se nos da la oportunidad», decía en 2005.

En esa zona, una hectárea de campo cotiza entre los 600 y los 700 dólares por hectárea. Es decir que al cambio libre de hoy, el campo tiene un valor cercano a los 30 millones de pesos, sin contar, claro, edificiones y maquinaria instaladas por los propietarios.