El impacto de la corrida del dólar se refleja en los precios de alimentos con insumos importados.
El referente del Chaco se refirió a tetrapacks, enlatados y harinas leudantes. Advirtió faltantes en productos de Precios Justos en mayoristas.
Ante la reciente fluctuación del dólar paralelo, que el martes bajó a 538 pesos, el vicepresidente de la Cámara Supermercadistas del Chaco, Miguel Simons, analizó la situación y destacó tres aspectos que afectan al sector. En primer lugar en los precios en góndola de ciertos alimentos, alienta la caída del consumo en los mercados de cercanía o barriales y además alertó que sigue la falta de productos enmarcados en el acuerdo sobre Precios Justos que los mayoristas ofrecen.

«El dólar se está comportando de una forma bastante errática con los precios, de hecho la mayoría de las empresas no están tomando el dólar oficial, se están manejando con el dólar financiero, no obstante eso hay muchos precios que están aumentando por encima de lo que vino aumentando el dólar» reconoció Simons.
El referente atribuye esta situación a dos cuestiones: Uno a los aumentos de los sueldos «que cada vez son más importantes. Aunque reconocemos que sigue siendo bajo el poder adquisitivo de los salarios, paradójicamente lo que se le paga al empleado no le sirve y al empleador le cuesta muchísimo pagar sueldos y aportes».
Segundo está la parte impositiva porque «al aumentar el valor de los productos aumenta también el valor de los impuestos entonces no es lo mismo pagar ingresos brutos por un paquete de yerba que costaba 400 pesos que por uno que ahora cuesta 1000. El volumen de lo que tenemos que retener para pagar impuestos es mucho mayor lo que agrava la descapitalización y la falta de poder hacer cualquier tipo de inversión, tanto capital monetario como humano. Cada vez hace falta juntar más para no atrasarte».

TETRAS, ENLATADOS Y ALIMENTOS CON IMPORTADOS
Dentro del sector alimenticio los productos que más sufren son los envasados en tetrapacks y los enlatados «porque son ciento por ciento dólar», advirtió Miguel Simons. También los productos con alta proporción de componentes químicos como las harinas leudantes se ven afectados en su precio. «El motivo por el que cuestan casi el doble o más que la harina común es porque el aditivo que llevan es importado».
Por otra parte Simmons destacó que: «Por cada cliente de un mayorista nosotros necesitamos aproximadamente tres clientes. Con la diferencia de que podemos atender de a 30 personas y ellos de a 300. Hay un desfasaje de dinero que se refleja en el consumo de nuestros supermercados que hoy es básico y escaso».
PRECIOS JUSTOS
Sobre el programa nacional Precios Justos el referente advirtió que «en el Chaco no existe». «En precios justos entre supermercados mayoristas y supermercados de cadena, en todo el Chaco hay siete u ocho adheridos, de los cuales cinco están en Resistencia. O sea, el resto de la provincia no la ve».

Sumado a eso, los productos de Precios Justos se ven en algunos supermercados, pero muy escasos. Por ejemplo, si vas cuando recién abren las puertas, por ahí consigues algo. Por lo general en mayonesa, mermelada, harina, aceite, leche.
Por último Miguel explicó que: «A su vez, lo que hace poco salió, que nunca se hizo publicidad porque realmente no existe, son los Precios Barriales».
«Cuando uno va al mayorista a buscar Precios Barriales, siempre lo que encuentra es lo que menos se vende. Eso es una constante. Pero hay tal desfasaje entre los costos de vida de una familia y sus ingresos, que por más que se recorra toda la ciudad de Resistencia buscando precios de la carne, el pollo, la verdura, o sea, que todavía tenga, ande detrás de la oferta y el dos por uno y el tres por dos, lo que sea, lo mismo no le va a alcanzar porque el costo de vida no es solamente el supermercado. Es general, en todo», cerró.