El panorama en los viajes en colectivo no es alentador, con ventas escasas que se mantienen.

Más allá del movimiento turístico del fin de semana largo, las empresas de colectivos y las boleterías locales viven un presente complejo.

Daniel Burgos es boletero en la terminal de ómnibus de esta ciudad. Tras el feriado largo habló sobre la sostenida baja en la venta de pasajes, algo que tan solo un año atrás no sucedía. «Hace quince o veinte días que se paralizó la venta de pasajes, a comparación de otros años. A finales de diciembre, tuvimos diez o doce días de trabajo fuerte y después mermó muchísimo», reconoció.

La baja en venta de pasajes de larga distancia preocupa a boleteros de terminales en el Sudoeste provincial.

Cabe destacar que se refiere a un pasaje de más de $63.000 para ir a Buenos Aires. «Desde diciembre aumentaron un poco más del 100% los precios y desde ahí se mantuvo», agregó. A pesar de que la empresa otorgó un 20% de descuento para momentos claves de viaje o para jubilados, los números no mejoran.

FUTURO DESALENTADOR

«Creo que esto va a ir de mal en peor por lo que se está viendo. Algunos dicen que más adelante vamos a estar mejor, dentro de un par de meses, pero en el mientras tanto los que somos chicos (las empresas que venden los pasajes en la terminal local) vamos a quedar en el camino, porque no estamos para aguantar muchos meses sin poder trabajar de una forma normal en la que podamos solventar los gastos», se sinceró.