Las ventas minoristas pymes subieron un 10,5% en marzo, pero no alcanzan a compensar las caídas de 2024

Un leve repunte en un escenario aún complejo
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó que las ventas minoristas pymes crecieron un 10,5% interanual en marzo de 2025, a precios constantes, según el Índice de Ventas Minoristas Pymes publicado este domingo 6 de abril. Sin embargo, este incremento no logra revertir las fuertes pérdidas de 2024, cuando las ventas se desplomaron un 12,6% en el mismo mes y acumularon una caída del 22,1% en el primer trimestre, en un contexto marcado por la recesión. Aunque la comparación mensual desestacionalizada mostró un tímido aumento del 0,1%, el acumulado del primer trimestre de 2025 refleja una mejora del 19,4%, señal de una recuperación incipiente pero insuficiente.

El crecimiento de marzo estuvo impulsado por factores estacionales como el cierre de la temporada de verano, el inicio del ciclo lectivo y estrategias comerciales como promociones, cuotas sin interés y descuentos. A pesar de esto, persisten limitaciones en la demanda, especialmente en rubros no esenciales, mientras que sectores ligados a la escolaridad o la estacionalidad lograron un leve despegue. «Muchos comercios notaron un repunte, pero no al nivel que esperaban para esta época», señala el informe, destacando que la falta de liquidez, el aumento de costos operativos y la competencia informal o de productos importados siguen siendo un lastre para el sector.

Análisis por rubro: luces y sombras
Todos los siete rubros relevados por CAME registraron subas interanuales en marzo. Perfumería lideró con un aumento del 23,6%, seguida por Farmacia (+16,8%) y Alimentos y Bebidas (+13,7%). En el acumulado trimestral, Alimentos y Bebidas encabeza con un crecimiento del 25,3%, reflejando cierta estabilidad en el consumo básico. Sin embargo, el panorama es dispar:

  • Alimentos y Bebidas: Mostró continuidad respecto a febrero en algunos comercios, aunque otros reportaron una leve desaceleración por el fin de las vacaciones y ajustes de precios. Los márgenes de mejora son acotados, pero la estabilidad prevalece.
  • Bazar, Decoración y Textiles de Hogar: Con una dinámica heterogénea, algunos negocios aprovecharon promociones y financiación, mientras otros sufrieron por la baja circulación de clientes y costos crecientes. Marzo fue un mes de transición.
  • Calzado y Marroquinería: El inicio del ciclo lectivo impulsó las ventas de productos escolares, pero la baja liquidez y la competencia informal limitaron el alcance del repunte. Las liquidaciones y cuotas sin interés fueron clave.
  • Farmacia: Estable, con un leve aumento por enfermedades estacionales y promociones. Los costos operativos presionan, pero el rubro mantuvo su posición.
  • Perfumería: Se destacó por una recuperación notable, gracias al Día de la Mujer, el inicio de clases y financiación. La adaptación comercial fue un factor decisivo.
  • Ferretería, Materiales Eléctricos y de la Construcción: Mostró una leve mejora, apoyada en obras privadas y facilidades de pago, aunque la falta de liquidez y el clima afectaron.
  • Textil e Indumentaria: El cambio de temporada y el regreso a clases dieron un impulso moderado, pero el escaso movimiento en las calles y la competencia externa frenaron un mayor crecimiento.

Desafíos y estrategias de supervivencia
El informe de CAME subraya que los comercios enfrentaron un marzo complejo, con alzas en costos operativos, impositivos y de alquileres, baja afluencia de clientes y dificultades para reponer stock o cubrir gastos fijos. La competencia de productos importados e informales, junto con una demanda contenida, redujo los márgenes de rentabilidad, especialmente en sectores como el textil. En este contexto, la adaptación fue esencial: el uso de medios de pago financiados, promociones agresivas y variedad en la oferta permitieron a muchos pymes sostenerse.

Expectativas: optimismo moderado en un entorno incierto
Las proyecciones de los comerciantes para los próximos meses reflejan un optimismo cauto. La mayoría espera una mejora en su situación económica, impulsada por la estabilidad de precios, acciones promocionales y una posible recuperación del consumo. Sin embargo, la cautela predomina ante un contexto con señales mixtas. «El repunte será gradual y depende del panorama general», indica el informe. Rubros como Perfumería y Ferretería muestran mayor confianza, mientras que Textil e Indumentaria mantiene una visión más reservada.

Un camino lento hacia la recuperación
Aunque las ventas minoristas pymes muestran signos de vida en 2025, el sector aún arrastra las heridas de 2024. La combinación de estrategias comerciales y factores estacionales ha dado un respiro, pero la falta de liquidez, los costos crecientes y la competencia externa siguen siendo obstáculos. Para los pymes, el desafío es claro: adaptarse y resistir mientras el consumo se reactiva lentamente. ¿Será este el comienzo de una recuperación sostenida o solo un alivio pasajero? El tiempo, y el contexto económico, lo dirán.