«Preocupación en River y Boca por el estado del campo de juego»

Los profesionales encargados del mantenimiento aseguran que llegarán con lo justo y que no será un problema para los jugadores. Se disputará este domingo desde las 15.30 en el Mario Kempes de Córdoba.

El Superclásico entre Boca y River se disputará el domingo a las 15.30 en el Mario Alberto Kempes de Córdoba, sede que despertó la preocupación por parte de los hinchas por el estado del césped, que está bajo mantenimiento y llegaría con lo justo al partido.

Sin pensar que se jugaría el Superclásico, los encargados del mantenimiento del terreno iniciaron un resembrado días pasados con semillas de pasto para invierno.

Lo que parecía una decisión acertada por capacidad y la ya probada experiencia de finales en el recinto cordobés, empezó a transformarse en una preocupación por el estado del campo de juego del estadio que lleva el nombre del goleador de la Copa del Mundo de Argentina 1978.

En las últimas semanas, los encargados del mantenimiento de la cancha resembraron el campo de juego con semilla de pasto para invierno e iniciaron los trabajos después del duelo entre Talleres de Córdoba e Independiente Rivadavia, el pasado sábado 6 de abril, e incluso se habrían demorado esperando que Instituto hubiera decidido jugar ante River el lunes pasado ahí, situación que finalmente no se dio ya que el partido se terminó jugando en el Monumental de Alta Córdoba. Más allá de que llegaría con lo justo, aseguran que no será un problema.

El ingeniero agrónomo a cargo del campo de juego, Marcos Ibáñez, aseguró que llegará «muy bien» para el Superclásico del domingo y explicó en detalle los plazos de los trabajos. «Es un proceso de tres o cuatro días que la cancha se ve con algunos defectos, pero tiene que ver con un proceso natural que se hace todos los campeonatos, todos los años», declaró.

«No es distinto a cualquier otro campeonato. Son los tiempos normales. El jueves de la semana pasada se terminó todos los trabajos de resiembra. Es el quinto día recién. En 48 horas vas a ver una imagen totalmente distinta de la cancha y, para el partido, va a estar muy bien», agregó Ibáñez.