Stefano Marconi Sgroi, el niño prodigio de Chaco que diseña un auto superdeportivo argentino

Tres Isletas, Chaco, 25 de abril de 2025 – Aunque nació en La Plata, el nombre de Stefano Marconi Sgroi, un niño de 8 años con el coeficiente intelectual más alto de Argentina (152), resuena con orgullo en Chaco, donde su historia inspira a una provincia que apuesta por la innovación, como lo demuestra el reciente lanzamiento del Sistema de Conectividad Satelital Móvil de ECOM Chaco. Declarado Personalidad Destacada por el Concejo Deliberante de La Plata, Stefano no solo ha leído más de 1.149 libros y domina cálculos mentales desde los 5 años, sino que participa activamente en el diseño del Valtor, el primer auto superdeportivo 100% argentino, un proyecto que refleja el talento nacional en un contexto donde Chaco busca posicionarse tecnológicamente.

Un genio apasionado por el automovilismo

Stefano, hijo de Adrián Marconi (carpintero) y Paola Sgroi (traductora), mostró su genialidad desde temprana edad: a los 7 meses comenzó a hablar, a los 18 meses identificaba marcas de autos, y a los 5 años sorprendía con cálculos mentales, como deducir la edad de una clienta de su padre. Diagnosticado como superdotado por la psicóloga Patricia Simao en 2022, su CI de 152 lo ubica en el 1% más inteligente del mundo, con habilidades equilibradas en razonamiento, memoria y comprensión.

Su pasión por el automovilismo, sin antecedentes familiares directos, se encendió con las revistas de autos de su abuelo Salvador Sgroi y las carreras de Fórmula 1. “Me define el automovilismo”, asegura Stefano, quien sueña con ser piloto de F1, ingeniero mecánico y fabricante de autos. Desde los 3 años, identificaba modelos como Talbot y Oldsmobile, y hoy, con mentorías de expertos como Roberto Ulibarri y Matías D’Amico, diseña componentes para el Valtor, un proyecto liderado por Sergio Arias y Pablo Kruszewski que busca competir en el mercado global.

Un aporte al orgullo nacional

El Valtor, presentado recientemente en la República de los Niños junto a una exhibición de autos históricos, es un símbolo del potencial argentino, comparable a iniciativas chaqueñas como el Jardín N°260 de Machagai o los adelantos de coparticipación para municipios. Stefano, quien colabora con bocetos y conceptos, trabaja codo a codo con figuras como Horacio Pagani, Oreste Berta y Rubén Fangio, hijo de Juan Manuel Fangio, su ídolo. “Quiero seguir aprendiendo y jugando”, dice, mientras impulsa una fundación para niños con altas capacidades, apadrinada por Fangio.

Su visión del futuro automotriz es audaz: critica los autos eléctricos por el impacto ambiental de sus baterías y aboga por soluciones más sostenibles. Esta perspectiva, combinada con su formación en el Instituto Módena de la UTN, lo posiciona como un innovador en un país que, según el INDEC, invierte solo el 0,5% del PBI en ciencia y tecnología, frente al **2,5% de economías desarrolladas.

Inspiración para Chaco

En Chaco, donde la brecha digital y la desigualdad económica (ingresos de $221.000 vs. $785.000 en CABA) son desafíos, la historia de Stefano resuena como un llamado a fomentar el talento joven. Iniciativas como el Sistema Satelital Móvil de ECOM o el Adelanto Chaco 24 del NBCH reflejan un espíritu innovador que podría impulsar a niños chaqueños a seguir su ejemplo. “Persigan sus sueños cada día”, es el mensaje de Stefano, que estudia taekwondo, inglés y disfruta de Harry Potter, pero prefiere los libros a las pantallas.

Reacciones en redes

En X, Stefano es un fenómeno. “A los 8 años diseña un superdeportivo y tiene un CI de 152. ¡Orgullo argentino!”, escribió @ContenidosN. @MotorARG celebró: “El Valtor con Stefano es la prueba de que Argentina puede brillar en tecnología”. Usuarios chaqueños se sumaron: “Chaco necesita más Stefanitos. ¡A apoyar el talento local!”, posteó @ChacoCrece.

¡Sumate al debate! ¿Qué opinás de la historia de Stefano? ¿Cómo puede Chaco inspirarse en su talento para fomentar la innovación? Compartí tu opinión en X con el hashtag #StefanoChaco o dejá tu comentario abajo.