Ucrania y Rusia culminan histórico intercambio de prisioneros: 303 defensores ucranianos regresan a casa

Kiev, 25 de mayo de 2025 – En un hito sin precedentes en el conflicto entre Ucrania y Rusia, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski anunció este domingo la liberación de 303 defensores ucranianos en la tercera y última fase de un intercambio de 1.000 prisioneros por cada bando, acordado en Estambul el 16 de mayo. Este canje, el mayor desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, marca el primer resultado tangible de las negociaciones directas entre ambos países en más de tres años, celebradas en Turquía. Mientras Ucrania celebra el retorno de sus soldados, Rusia confirmó la liberación de 303 militares propios, ahora en Bielorrusia, en un proceso que refleja una rara cooperación en medio de la guerra. 🇺🇦🇷🇺
Un intercambio histórico en tres etapas
El proceso, descrito como el 65° intercambio de prisioneros desde el comienzo del conflicto y el sexto en 2025, se completó en tres días. Según informó Zelenski en su canal de Telegram, el viernes 23 de mayo regresaron 390 ucranianos (270 militares y 120 civiles), el sábado 24 volvieron 307 soldados, y el domingo 25 se liberaron los últimos 303 defensores, incluyendo miembros del Ejército, la Guardia Nacional, el Servicio de Fronteras y el Servicio Especial de Transporte del Estado. Entre los liberados destacan 70 defensores de Mariupol, cuyos testimonios recuerdan la feroz resistencia en la ciudad sitiada en 2022.
“La tercera parte del canje de 1.000 por 1.000 acordado en Turquía ha sido completada. Gracias al equipo que trabajó sin descanso para implementar esto con éxito”, expresó Zelenski, subrayando el compromiso de Ucrania de “traer de vuelta a cada ucraniano en cautiverio ruso”. La Coordinación de Tratamiento de Prisioneros de Guerra ucraniana detalló que los 303 liberados el domingo son todos hombres, en su mayoría soldados rasos y sargentos, quienes recibirán atención médica, rehabilitación y compensación económica por el tiempo en cautiverio.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso confirmó que los 303 soldados rusos liberados el domingo fueron trasladados a Bielorrusia, donde reciben asistencia psicológica y médica antes de ser llevados a Rusia para tratamiento y rehabilitación. El comunicado ruso señaló que el intercambio, acordado en Estambul, se realizó bajo el formato “1.000 por 1.000”, con un total de 390 liberados el viernes, 307 el sábado y 303 el domingo.
Contexto y desafíos
Este intercambio, mediado por los Emiratos Árabes Unidos y celebrado en la región de Chernihiv (Ucrania) y Bielorrusia, se produjo en un contexto de alta tensión. El mismo domingo, Rusia lanzó el mayor ataque aéreo de la guerra, con 367 drones y misiles contra más de 30 ciudades ucranianas, dejando al menos 12 muertos y decenas de heridos, según el Servicio de Emergencia Ucraniano. Zelenski condenó los ataques, que afectaron zonas residenciales como Markhalivka, cerca de Kiev, y llamó a sus aliados occidentales a intensificar sanciones contra Moscú.
A pesar de la violencia, el canje representa un rayo de esperanza. Anton Kobylnik, uno de los liberados, expresó su alivio al regresar tras tres años en cautiverio: “No sentiré que estoy realmente en casa hasta que abrace a mi madre en su cabaña”. Sin embargo, miles siguen en cautiverio: Ucrania estima que 8.000 soldados y 16.000 civiles permanecen en manos rusas, incluyendo al exalcalde de Jersón, Volodímir Mykolayenko.
El intercambio también puso en evidencia las dificultades de las familias. Tetiana Rossina, madre de un soldado desaparecido, acudió al punto de encuentro con una foto de su hijo Oleksandr, buscando información: “Visito cada intercambio con la esperanza de que alguien lo reconozca”. La presencia de familiares con carteles de sus seres queridos subraya la magnitud de la tragedia humanitaria.
Un paso hacia la paz, pero con desafíos pendientes
El canje, descrito por Zelenski como el “único resultado significativo” de las negociaciones en Estambul, destaca por su escala y por incluir civiles, un hecho poco común en intercambios previos. Sin embargo, las conversaciones no lograron avances hacia un alto el fuego, con Rusia exigiendo condiciones calificadas como “inviables” por Ucrania. El ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umerov, expresó esperanza en que el intercambio sea un primer paso, pero señaló que la presión internacional, incluyendo el respaldo de EE.UU., será crucial.
La intervención de Donald Trump, quien anunció el intercambio en redes sociales antes de su finalización, rompió con el protocolo habitual y generó controversia. Aunque felicitó a ambas partes, su decisión de no imponer sanciones a Rusia tras hablar con Vladímir Putin refleja un cambio en la política estadounidense, alejándose del apoyo incondicional a Kiev.
En el Chaco, donde la comunidad celebró el 28° aniversario del Complejo Cultural Guido Miranda con el Pericón Nacional, la noticia del intercambio resuena como un recordatorio de la importancia de la unidad y la resiliencia, valores que también inspiran a los chaqueños en su lucha por el desarrollo.
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