UIA Alerta sobre Profundización de la Recesión en Argentina: 11,4% de Empresas Dejaron de Exportar en 2025

21 de junio de 2025 – La Unión Industrial Argentina (UIA), a través de su Monitor de Desempeño Industrial (MDI), advirtió que el sector industrial argentino continúa en zona de recesión, con un panorama preocupante para el primer semestre de 2025. Según una encuesta realizada por el Centro de Estudios de la UIA (CEU) entre más de 600 empresas, el 11,4% de las que exportaban dejaron de hacerlo debido a problemas de competitividad, aumento de costos y la apreciación del peso frente al dólar. Este deterioro se refleja en una caída del 7,4% en las exportaciones nacionales en mayo, según el INDEC, con las Manufacturas de Origen Industrial (MOI) disminuyendo un 2% en volumen. En Chaco, donde el desempleo alcanzó el 8,9% y la Canasta Básica Total superó los $1,08 millones (ISEPCi), esta crisis impacta especialmente a las pymes, agravando las dificultades económicas locales. ¿Cómo crees que esta situación afecta a tu comunidad? Dejá tu comentario y únete al debate.

Principales Hallazgos del Monitor de Desempeño Industrial

El Índice MDI, que mide variables como producción, ventas, empleo y exportaciones, se mantuvo en abril de 2025 en 45,8 puntos, por debajo del umbral de 50 que separa la expansión de la contracción, según el relevamiento del CEU realizado entre el 8 y el 22 de mayo. Los resultados reflejan una persistente debilidad en el sector industrial, con los siguientes puntos destacados:

  • Producción: El 33% de las empresas reportó una caída en su producción en comparación con el primer trimestre de 2025, mientras que solo el 26,1% registró un aumento. El índice de difusión (porcentaje de empresas con subas menos las que reportaron bajas) fue de -6,9 puntos, retomando valores negativos tras una leve señal de recuperación en octubre de 2024.
  • Ventas Internas: El 41,3% de las empresas indicó una disminución en sus ventas al mercado interno, frente a un 24,9% que reportó aumentos. Aunque la brecha entre ambos grupos se redujo respecto al relevamiento anterior, las respuestas negativas siguen predominando.
  • Exportaciones: El 31,1% de las empresas que aún exportan registró caídas en sus ventas externas, mientras que solo el 15,2% reportó incrementos. Lo más alarmante es que el 11,4% de las empresas que exportaban dejaron de hacerlo, atribuyendo esta decisión a la pérdida de competitividad por costos (57,8%) y la apreciación del peso (31,3%).
  • Empleo: En abril, el 20,1% de las empresas redujo personal, superando al 14,8% que incorporó trabajadores. Esto se alinea con la pérdida neta de 4.162 empleos asalariados en marzo (-0,4% respecto a febrero), el nivel más bajo en más de dos años.

Los costos de producción, especialmente los salariales (mencionados por el 43,6% de las empresas), se consolidaron como la principal preocupación, desplazando a la caída de la demanda. La UIA señaló que la apreciación del peso, utilizada como ancla antiinflacionaria, ha erosionado la competitividad, afectando especialmente a las pymes industriales, que dependen más del tipo de cambio y enfrentan mayores dificultades para acceder a financiamiento con tasas promocionales.

Impacto en las Exportaciones y la Balanza Comercial

El cese de exportaciones por parte del 11,4% de las empresas es un indicador crítico, que según la UIA se reflejó en una caída del 7,4% en las exportaciones totales en mayo, la primera baja significativa del año según el INDEC. Las Manufacturas de Origen Industrial (MOI), que incluyen productos como carne, medicamentos y maquinaria, disminuyeron un 2% en cantidad, aunque el sector automotriz mostró un crecimiento del 16,4% mensual y 14,7% interanual, exportando 26.346 vehículos en mayo.

En Chaco, donde el rubro cárnico es clave, esta pérdida de competitividad agrava la situación económica. El Senasa inició inspecciones en frigoríficos de Puerto Vilelas y Charata para mejorar estándares sanitarios y facilitar el tráfico federal, pero los aumentos de costos (+13,84% en carnicerías en mayo, según ISEPCi) y la caída del consumo de carne vacuna (-12,3% en 2024, según CICCRA) reflejan las dificultades del sector.

A nivel nacional, el superávit comercial se redujo drásticamente en el primer cuatrimestre de 2025 a USD 1.265 millones, un 79% menos que en 2024, debido a un aumento del 35,7% en importaciones frente a un crecimiento de solo 5,8% en exportaciones. Las pymes exportadoras manufactureras, que representan el 53% de las empresas exportadoras pero solo el 7,2% del valor exportado, son las más afectadas por la falta de competitividad y los costos logísticos.

Contexto en Chaco: Una Región Golpeada

En el Gran Resistencia, el desempleo alcanzó el 8,9% en el primer trimestre de 2025, el más alto del NEA, con una pérdida de 13.000 empleos respecto a 2024 (INDEC). La Canasta Básica Alimentaria subió a $475.686 (+46,47% interanual), y los ingresos de una pareja con salario mínimo ($616.000) no alcanzan para superar la línea de pobreza ($1,08 millones). Las lluvias recientes, que acumularon 20-30 mm y causaron anegamientos, también impactaron la producción ganadera, elevando precios de la carne como el asado (+21,21%) y el pescado (+52,94%).

En este escenario, las pymes chaqueñas, especialmente las vinculadas al sector cárnico y agroindustrial, enfrentan desafíos similares a los reportados por la UIA. La pérdida de competitividad exportadora, sumada a la caída del consumo interno (-9,8% en 2024, según INDEC), limita las oportunidades de crecimiento. Iniciativas como las inspecciones del Senasa buscan fortalecer la industria cárnica local, pero la apreciación del peso y los costos logísticos dificultan su impacto inmediato.

Perspectivas y Reflexión

El informe de la UIA refleja un sector industrial en contracción, con una recuperación no consolidada a pesar de una leve mejora en abril (MDI de 45,8 puntos, +3,7 respecto a enero). La caída de exportaciones, liderada por pymes, pone en riesgo el superávit comercial y la generación de divisas, esenciales para cumplir con los pagos al FMI (USD 2.793 millones en 2025). Aunque el sector automotriz muestra signos de recuperación, las pymes industriales, que en Chaco dependen de sectores como la carne y el comercio, enfrentan un panorama desalentador.

El gobierno de Javier Milei, que proyecta un rebote del 5% en el PBI para 2025, enfrenta el desafío de revertir esta tendencia mediante reformas estructurales que reduzcan costos y mejoren la competitividad. Medidas como la baja de aranceles a 4.000 posiciones de MOI fueron bien recibidas por la UIA, pero se consideran insuficientes sin un tipo de cambio competitivo y financiamiento accesible. En Chaco, la recuperación del consumo en comercios de barrio (+16,1% en mayo, según Scentia) ofrece una oportunidad, pero requiere políticas que apoyen a las pymes locales.

¿Qué medidas crees que podrían tomarse para apoyar a las pymes industriales en Chaco y Argentina? ¿Cómo impacta esta recesión en tu comunidad? Compartí esta nota en tus redes con el hashtag #IndustriaChaco2025 y contanos: ¿qué soluciones proponés para reactivar la industria y las exportaciones? Dejá tu comentario y sigamos analizando cómo superar esta crisis en el Chaco y el país.